Dos de cada seis trabajadores quintanarroenses demandaron a sus empresas por conflictos de trabajo durante 2022, principalmente por incumplimiento de contrato, retención ilegal de sueldos y hasta explotación laboral.
Esto derivó en 9 mil 201 demandas y convenios de trabajo prejudiciales, así como 88 emplazamientos de huelga.
Aunque la cantidad se redujo en un 82%, comparado con el año 2021, la entidad se colocó entre las 10 del país que más registran conflictos laborales.
En cuanto a los casos resueltos, en el 43% tanto el patrón como el empleado llegaron a un acuerdo para el retiro voluntario del obrero con el pago correspondiente de finiquito y las prestaciones correspondientes.
En otro 33% se decidió terminar el contrato con la consecuente liquidación. Sólo en el 22% las partes decidieron continuar la relación laboral.
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